El canciller austriaco afirma que la situación de amenaza en Viena era "muy grave". Karl Nehammer, señaló ayer que "la intensa colaboración" entre la Policía y la Dirección de Inteligencia y Seguridad del Estado, dependiente del Ministerio de Interior, logró "detectar a tiempo" y "combatir" la amenaza, así como "evitar una tragedia" al frustrar un atentado durante los conciertos de la cantante estadounidense Taylor Swift que iban a celebrarse esta semana en Viena y que, debido a estas informaciones, han sido cancelados.

Nehammer, que ha indicado que "la cancelación de los conciertos de Taylor Swift por parte de los organizadores es una amarga decepción para todos los fans de Austria", ha asegurado que "la situación en torno al ataque terrorista aparentemente planeado en Viena era muy grave", tal y como reza un comunicado publicado en su perfil de la red social X. 

"Vivimos en una época en la que se utilizan medios violentos para atacar nuestro modo de vida occidental. 

El terrorismo islamista amenaza la seguridad y la libertad en muchos países occidentales. Precisamente por eso no renunciaremos a nuestros valores como la libertad y la democracia, sino que los defenderemos aún con más vehemencia. 

Estos valores son la base de nuestra sociedad y nos hacen resilientes contra el extremismo y el terrorismo. Es importante permanecer alerta, permanecer unidos y tomar medidas decisivas contra el islamismo", ha expresado. 

Las autoridades austriacas han detenido a dos personas por planear presuntamente un atentado terrorista durante los conciertos. 

Uno de ellos es un ciudadano austriaco de 19 años, arrestado en Ternitz, localidad ubicada en el estado de Baja Austria, que se había radicalizado por Internet en los últimos meses y llegó a hacer un juramento de lealtad al grupo terrorista Estado Islámico. 

Un segundo sospechoso, del que no hay más detalles, ha sido detenido en Viena.