El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, anunció ayer la creación de una Autoridad Nacional Climática para actuar contra fenómenos climáticos extremos en un momento en el que la región de la Amazonía se enfrenta a una sequía unida a un gran número de incendios.
“Debemos centrarnos en la adaptación y la preparación para hacer frente a estos fenómenos. Para ello, estableceremos una Autoridad Climática y un Comité Técnico-Científico para apoyar y coordinar la implementación de este plan por parte del Gobierno federal", ha afirmado Lula, según la Agencia Brasil.
Lula ha realizado estas declaraciones en el marco de un encuentro con congresistas, altos cargos gubernamentales y decenas de alcaldes de la región, donde 61 de los 62 municipios y más de 300.000 personas se están viendo afectados por la sequía.
Por su parte, la ministra de Medio Ambiente y Cambio Climático, Marina Silva, ha informado de que los incendios ya han afectado a unos 1,1 millones de hectáreas de bosque, lo que demuestra que "está perdiendo la humedad" y que ya "no es inmune al fuego".
"En este momento, estamos viviendo una combinación perversa de varios factores que están creando esta situación. El primero de ellos es el problema del cambio climático, que está cambiando el régimen de lluvias, que está cambiando las estaciones secas y húmedas.
A veces llueve demasiado, a veces llueve muy poco. Junto a esto, tenemos el problema de la deforestación y los incendios, que acaban empeorando aún más la situación", ha añadido.
El día anterior, el Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE) de Brasil informó sobre un aumento del 100 por ciento de los incendios registrados este año en comparación con 2023, de los que la mitad se han producido en la Amazonía.
Las autoridades brasileñas han contabilizado ya 159.411 focos desde principios de 2024 frente a los 79.315 del mismo periodo del año anterior, y se acerca al total registrado en todo 2023, cifra que asciende a los 189.000. (EUROPA PRESS)