La cazadora estadounidense Tess Thompson Talley, conocida popularmente como Britany L., se convirtió en objeto de duras críticas después de que en una foto suya apareciera sosteniendo un gran leopardo muerto.
La imagen fue compartida a principios de septiembre en el sitio web del Safari Club International (SCI), organización internacional con sede en EE.UU. dedicada a proteger la libertad de caza, según informó la cadena Fox News.
En su publicación, SCI afirmaba que el leopardo abatido por Britany podría tratarse del noveno de mayor tamaño jamás cazado, lo que desató la indignación de los internautas.
La foto se volvió viral después de que David Bonnouvrier, cofundador de la campaña 'Knot on my Planet', que tiene por objetivo detener la caza furtiva de marfil, la compartiera en su cuenta de Instagram.
"Un leopardo macho muy grande matado recientemente por Britany L., miembro del Safari Internacional Club con sede en Tucson AZ. Llamadles y decidles lo que pensáis", comentó Bonnouvrier, agregando a su post los hashtags "monstruo", "idiota" y "findthisb***h" ('encuentre esta z***a', en inglés).
La iniciativa ha sido respaldada por muchos usuarios de las redes sociales, incluidas algunas celebridades como la modelo y actriz londinense Naomi Campbell, la supermodelo, activista y filántropa holandesa Doutzen Kroes o la actriz y filántropa estadounidense Kyle Richards, que expresaron su desaprobación compartiendo la foto en sus cuentas.
"¿Cómo puedes enorgullecerte y alegrarte de matar a un hermoso animal como este gran leopardo macho? ¡La mujer de la foto debería avergonzarse de sí misma!", escribió Kroes.
"Sé que no es agradable de ver, pero si no hablamos de esto, nunca se detendrá", apoyó Richards.
A principios de este verano se hizo popular otra foto de Britany, en la que posaba sonriendo con una jirafa muerta, aparentemente, una especie muy rara, según explicó en su cuenta de Twitter Africa Digest, que pidió a sus seguidores que compartieran la publicación.
El caso de Tess Thompson Talley se une al de otros cazadores que, tras posar con sus trofeos, se han convertido en los últimos años en diana de la indignación de los usuarios en las redes sociales.
Fuente: Russia Today.