Gremios del sector público, que representan a agentes de la administración central, municipales y docentes, salieron en defensa de la cláusula de actualización automática del salarial ante la pérdida por inflación, conocida como “cláusula gatillo”.

En las últimas horas, y ante el panorama nacional incierto en los económico, el gobernador de la provincia, el ministro de Economía, y hasta el equipo de transición de Omar Perotti pidieron rediscutir la aplicación de esta herramienta para el segundo semestre.

La semana pasada Gonzalo Saglione aclaró que “con la realidad que vivimos, evidentemente esto debe ser puesto en la mesa de discusión a fin de que la cláusula gatillo sirva a los trabajadores, pero que también haga sostenible las finanzas provinciales. Nos sentaremos a hablar con los gremios para tratar de avanzar de la manera más responsable posible”. En el mismo sentido se expresó Lifschitz este fin de semana, después de presidir en Venado Tuerto los actos centrales para conmemorar un nuevo aniversario de la muerte de San Martín. Y ayer el referente del Perottismo, Ruben Michlig, dijo que “la cláusula gatillo no es eterna”, y despertó la reacción de los gremios.

Desde la Federación de Sindicatos de Trabajadores Municipales de la provincia (Festram) se emitió un comunicado en el cual advierten que “no permitirán que se intente suspender la aplicación de la cláusula gatillo pactada para la política salarial del corriente año”.

“Los trabajadores están sufriendo el atraso del pago de sus salarios, en el marco de una inflación que supera el 60% anual, con precios de la canasta familiar sin referencia y en medio de la escasez de productos básicos. Resulta agresivo escuchar a políticos y funcionarios que el problema del déficit de nuestra Provincia es la cláusula gatillo”.

En este sentido, el secretario general de Festram, Claudio Leoni, recomendó a funcionarios y dirigentes políticos a escuchar la voz de las mayorías: “El pueblo y los trabajadores dijeron en las urnas basta de ajuste liberal e intentar afectar la cláusula es no haber entendido nada de lo que nos arrastró a la crisis”.

En tanto, representantes de Amsafe y Sadop consideran “improcedentes e inoportunas” las declaraciones de Michlig. Martín Lucero, de Sadop Rosario, declaró que “hacer proyecciones a seis meses es muy aventurado, no lleva tranquilidad”.

Desde Amsafé provincial señalaron que la cláusula gatillo tiene que mantenerse y discutirán con las nuevas autoridades, no sólo la política salarial si no toda la política educativa que incluye la inversión en infraestructura escolar por el estado de deterioro de las escuelas. "Entendemos que la situación financiera de la provincia no es la mejor, pero el gobierno que viene tendrá que ver de dónde se generan los recursos para afrontar esta situación, a qué sector le va a pedir un mayor esfuerzo impositivo", indicó Javier Almirón de la Comisión Directiva de Amsafe Provincial.

A su turno, el secretario general de UDA Santa Fe, Sergio Romero, advirtió que “en estos tiempos la cláusula gatillo deber ser política de Estado”. Agregó que “nuestra entidad sindical se encuentra en estado de sesión permanente y presta a iniciar medidas de fuerza si se toca la cláusula gatillo”.

Por último, el secretario General de ATE Santa Fe, Jorge Hoffmann, recordó que la cláusula “es un instrumento que estará en vigencia hasta fin de año, veremos que pasará el año próximo, vamos a estar en un escenario totalmente distinto al actual desde lo económico, habrá discusiones salariales en ese futuro".