Puede sonar insólita la idea meterse en la boca del lobo de esta manera, pero de hecho es una práctica bastante común la de pasar droga a familiares que se encuentran detenidos en una comisaría. Y generalmente la droga entra escondida en la comida.
Este fue el caso en la comisaría 43 de la ciudad de Embarcación, en el norte de Salta, cuando un joven de 20 años trató de pasarle marihuana a un detenido dentro de un cucurucho con papas fritas, algo inédito hasta el momento.
Pero los efectivos, habituados a este tipo de prácticas, encontraron la droga oculta y las pruebas de narcotest arrojaron un resultado positivo para marihuana, siendo un total de 36 dosis de esta sustancia.
La droga fue secuestrada en el instante, mientras que el joven que trató de pasar la marihuana quedó a disposición de la justicia.
Fuente: El Once