Mientras continúan las protestas, la represión y los muertos en Venezuela -ya son 89 desde que comenzaron las manifestaciones a fines de abril último-, el Papa volvió a hacer ayer un llamado para que se ponga fin a la violencia y se encuentre una solución pacífica y democrática de la crisis que golpea el país.
Después de la oración mariana del Angelus, desde la ventana del despacho del Palacio Apostólico, Francisco recordó que el próximo 5 será el día de la fiesta de la independencia en Venezuela. "Aseguro mi oración para esta querida nación y expreso mi cercanía a las familias que han perdido a sus hijos en las manifestaciones callejeras", dijo ante miles de fieles reunidos en la Plaza San Pedro.
"Hago un llamamiento para que se ponga fin a la violencia y se encuentre una solución pacífica y democrática de la crisis", agregó. "Que nuestra Señora de Coromoto interceda para Venezuela", exhortó, pidiendo finalmente a la multitud reunida rezar un avemaría para el país latinoamericano.
Fuente: La Nación