Emanuel Ginóbili es un jugador decisivo. Lo fue para la Selección argentina y también para San Antonio. Pero a los 40 años está claro que todavía puede seguir dando sorpresas. Y así lo hizo en el triunfo de los Spurs, frente a los Dallas Mavericks, por una nueva jornada de la NBA. Es que con apenas 3,1 segundos por jugar, Manu se hizo cargo de la última pelota y consiguió el doble con el que su equipo se impuso por 98 a 96. Una máquina, sí.
Jugando con el reloj y aprovechando un bloqueo, Manu demostró que a pesar de enfrentarse a jugadores más jóvenes, aún conserva la energía para realizar penetraciones como las de sus primeros años en la NBA. Y también, para dejar constancia de que en esta temporada (¿la última?) no tiene inconvenientes en hacerse cargo de las pelotas más calientes.
De hecho, hace apenas ocho días, frente a los Boston Celtics, Manu también había sido quien jugó la última bola y, sobre la chicharra, convirtió para que su equipo se llevara otra victoria.
Volviendo al partido ante los Dallas Mavericks, Manu terminó con 12 puntos, cinco rebotes y tres asistencias. Mientras que la gran figura de la noche fue LaMarcus Aldridge, quien convirtió 22 puntos y bajó 14 rebotes.
Fuente: Clarín