La inflación de junio trepó al 1,3% y en los últimos doce meses acumula un 23,4%, según el ‘IPC Congreso‘ que refleja estadísticas elaboradas por consultoras privadas.

El informe, presentado por legisladores de la oposición, destaca que en el primer semestre del año la inflación fue de 11,7%, “en línea con el promedio de la última década (exceptuando 2014 y 2016, años de devaluaciones con fuertes subas de tarifas)”.

Las principales subas del mes estuvieron explicadas por equipamiento y mantenimiento del hogar, y alimentos y bebidas.

En el caso de alimentos, la suba alcanzó 1,5%, algo menos que en los meses anteriores, en parte debido a la evolución de los productos estacionales (especialmente frutas).

De hecho, el ‘IPC Core‘ (que excluye tanto estacionales como regulados) sigue sin evidenciar una desaceleración significativa: en junio mostró una suba de 1,8%, en línea con el promedio de los primeros cinco meses del año.

"En efecto, uno de los principales focos de preocupación es que el IPC Core permanezca en torno de estos niveles, ya que implica que la inflación estructural todavía no abandona el rango del 20%/25% anual de los últimos 10 años", de acuerdo con el informe.

Por ello, el reporte elaborado por los diputados alertó que "preocupa que sobre esta base elevada en julio se concentren muchos aumentos puntuales, como naftas, expensas, prepagas, cigarrillos y personal doméstico, que seguramente empujar n el índice al rango del 1,7%/2% (y sin considerar un traspaso a precios de la reciente suba del dólar)".

De esta forma, en los primeros siete meses del año la suba de precios acumularía cerca de 14%.