Un joven de 26 años fue imputado por el crimen de su padrastro, ocurrido días atrás en Laguna Paiva. El caso tomó trascendencia porque la información forense daba cuenta de que el muchacho había convivido con el cuerpo sin vida durante varios días.
Ahora, en una audiencia imputativa realizada en los tribunales de Santa Fe, el sujeto fue acusado de la autoría del delito de homicidio simple, y quedó alojado en un centro de salud mental por ser una persona que presenta trastornos del espectro autista.
Fuentes judiciales informaron que la decisión se tomó en base a lo establecido por el Artículo 107 del Código Procesal Penal santafesino, y tras el acuerdo de los representantes de la Fiscalía, la Defensa y del juez Héctor Gabriel Candioti.
Además se ordenó la conformación de una Junta Médica de Salud Mental, para evaluar si el joven es consciente de sus actos, paso previo para declarar o no la inimputabilidad.
La víctima es su padrastro, de 51 años, identificado como José Isidoro Severo Ramos, quien fue hallado sin vida la madrugada del pasado lunes luego de un llamado anónimo al 911.