La Justicia investiga la muerte de la periodista y diputada porteña Débora Pérez Volpin como algo más que una cuestión accidental.
El juez Gabriel Ghirlanda caratuló el expediente como "homicidio culposo" y, según pudo saber Infobae, una médica se autoimputó, posiblemente para tener acceso a la causa, porque ni la fiscal Nancy Olivieri ni el magistrado acusaron formalmente a ningún sospechoso.
El cuerpo de la ex conductora del noticiero Arriba argentinos todavía permanece en el Sanatorio de La Trinidad. Está previsto que durante el transcurso de la tarde sea trasladado a la morgue judicial para que un equipo médico lleve a cabo la autopsia.
Fuentes judiciales aclararon a este medio que la médica, una de las profesionales que estuvieron a cargo del procedimiento que derivó en la muerte de Pérez Volpin, se presentó espontáneamente en la comisaría 23ª de la Policía de la Ciudad (donde la familia de la periodista hizo la denuncia por su muerte) y se puso a disposición del Tribunal.
Fuente: Infobae