El delincuente que ingresó ayer a un local de venta de indumentaria deportiva y atacó a su dueño con un cuchillo para robarle estuvo fue detenido a tan solo unas cuadras de allí por la policía y se supo que ya contaba con antecedentes delictivos en la ciudad, algunos de los cuales trascendieron por su espectacularidad.
Se trata de la misma persona que en junio de este año asaltó un kiosco en Bulevar Gálvez y calle Laprida, salió corriendo en dirección a la laguna Setúbal y se escondió en una cueva con piso de arena, ubicada debajo del Puente Colgante.
Tiene 19 años y en ese momento le encontraron un revolver sin balas. Además, solo en lo que va de este 2019, la policía lo identificó, demoró y/o detuvo por otros 4 hechos entre abril y julio: Hurto por escalamiento, Robo calificado, Robo y amenazas calificadas y Encubrimiento.
Mientras tanto, el comerciante Gabriel Otte continúa en estado crítico en el Hospital Cullen, donde una de las heridas generó que fuera enviado directamente al quirófano donde tuvieron que operarlo en su estómago, hígado y páncreas y se encuentra internado en terapia intensiva, sin respirador aunque en estado reservado.