— Telam
El fin de las retenciones, la eliminación de las restricciones que existen para exportar y poder contar con reglas claras que den certidumbre, son las principales expectativas y pedidos que referentes y autoridades de entidades y cámaras pertenecientes a la agroindustria plantean de cara a la asunción de Javier Milei como presidente el próximo domingo.
Si bien todavía no fue anunciado de forma oficial, todo apunta a que el ingeniero agrónomo Fernando Vilella será el nuevo secretario de Agricultura a partir del 10 de diciembre, cartera que pasaría a llamarse de Bioeconomía.
El jueves pasado, Vilella, acompañado por sus principales colaboradores, entre los que se encuentran el presidente de la Asociación de Maíz y Trigo Argentino (Maizar), Pedro Vigneau, y el expresidente de la Fundación Barbechando Germán Paats, se reunió con parte del equipo técnico del designado ministro de Economía, Luis Caputo.
Según indicaron fuentes cercanas al encuentro, Vilella habría obtenido las respuestas que necesitaba escuchar para poder asumir el desafío de encarar la misión y ahora resta que Caputo oficialice la designación.
El exdecano de la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires (Fauba), junto a Vigneau y Paats, presentaron hace algunos meses un trabajo a La Libertad Avanza (LLA) sobre políticas agropecuarias, con el objetivo puesto en lograr un crecimiento productivo en el sector.
El documento habla de un programa de reducción de retenciones, la necesidad de adoptar un tipo de cambio único, suprimir las restricciones que existen para las exportaciones del sector y la necesidad de mantener el flujo comercial con países como China y Brasil.
Justamente estos puntos son los principales pedidos que surgen desde el sector para el nuevo gobierno.
En diálogo con Télam, el presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Carlos Castagnani, planteó la necesidad de que Milei "convoque al sector productivo para colaborar de manera conjunta en la elaboración de políticas agropecuarias".
"Pediremos la reducción y eliminación de gravámenes como los derechos de exportación, esperando que se materialice prontamente, dando inicio a una senda de desarrollo para nuestra nación. También abogamos por una revisión fiscal y tributaria", dijo Castagnani.
El dirigente ruralista remarcó, asimismo, la importancia de llevar adelante "un ambicioso programa de infraestructura a nivel nacional", que involucre "la mejora de vías rurales, puentes y la modernización de instalaciones logísticas".
Por último, subrayó "la necesidad de fomentar un desarrollo y una política orientada hacia las economías regionales y la producción lechera. Reconocemos la diversidad productiva de nuestro país y abogamos por políticas específicas que impulsen el crecimiento sostenible en cada región, promoviendo la equidad y generando empleo en las áreas rurales".
Por su parte, el presidente de la Cámara de la Industria Aceitera y del Centro de Exportadores de Cereales (Ciara-CEC), Gustavo Idígoras, indicó que "la expectativa con el nuevo gobierno es que haya un plan plurianual de la producción exportación agroindustrial con una visión federal, productiva, sustentable e inclusiva".
"Los temas del agro pasan por diferentes andariveles o pilares: en primer lugar, un pilar de financiamiento a la producción; en segundo, una regularización del comercio exterior, con la eliminación de las restricciones a la exportación en trigo, maíz y carne vacuna y en la importación de insumos. También se tiene que ir a una unificación del tipo de cambio y un programa de derechos de exportación para su eliminación", completó Idígoras.
A su turno, el presidente de la Federación Argentina de la Industria Molinera (FAIM), Diego Cifarelli, planteó que "lo que el agro necesita que se le saquen los pies de encima. Es una actividad que necesita libertad, generar sus propios objetivos y que por parte de la acción de gobierno requiere que se le quiten los obstáculos".