El Centro de Salud de Pompeya, uno de los más grandes e históricos de la zona norte, atraviesa una situación crítica. Así lo describió Viviana Servidio, delegada de ATE, quien advirtió que el establecimiento —que debería dar cobertura a siete barrios— funciona con servicios médicos mínimos y sin personal clave.

“Hoy los generalistas están cubriendo todo: hacen las funciones de ginecólogo, de clínico… porque no hay especialistas”, explicó Servidio. El panorama empeora en el área social: hace más de dos años y medio que el centro no cuenta con trabajadores sociales. “Si bien hacemos tareas sociales, no tenemos las herramientas que sí tiene un profesional del área”, lamentó.

Ante la falta de atención especializada, los pacientes son derivados al Nuevo Hospital Iturraspe y al Mira y López. Pero no todos pueden llegar. “La gente no tiene medios económicos para trasladarse. No estamos como hace unos años, ahora se les complica muchísimo”, denunció Servidio, quien además remarcó que muchos vecinos deben exponerse a situaciones de inseguridad para asistir a estos hospitales desde muy temprano.

Pese a los reclamos formales, las respuestas no llegan. “Hicimos notas firmadas por todo el equipo, nos reunimos, estamos en diálogo permanente, pero las soluciones no aparecen”, señaló la delegada, quien invitó a los funcionarios del Ministerio de Salud a recorrer el lugar y ver de primera mano la sobrecarga del personal.

“A todos los gobiernos les toca defender la salud pública”, concluyó Servidio, en un mensaje claro y directo a las autoridades.

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