En el último día de la semana y luego de la relativa calma del jueves , el dólar volvió a pegar otro fuerte salto y superó los $ 24.
Cuando en algunos bancos ya llegaba a $ 25, el Banco Central salió a intervenir.
A nivel mayorista, el mercado donde operan los bancos, el Central y las grandes empresas, la escalada llegó a superar el $ 1,25 y el dólar tocó los $ 24,21. Cuando eso sucedió, la entidad monetaria intervino con unos 9.000 millones de dólares y logró bajarlo a $ 23,47.
El billete minorista cerró a $ 23,70 en el Banco Nación, a $ 24 en el Provincia, $ 23,69 en el Francés, y $ 24,10 en el Galicia.
El jueves, si bien en el arranque del día el dólar tuvo una baja de casi 20 centavos gracias a un mejor panorama externo, luego se recuperó y terminó en $ 23,22 en los bancos y $ 22,70 en el mayorista.
En el medio, apareció el Banco Central, con ventas por US$ 139,5 millones. La mesa de dinero del organismo eligió vender en el mercado de contado y no intervenir en el de futuros, como había hecho en las dos ruedas previas.
Ya circula entre los analistas la impresión de que una de las sugerencias del FMI para corregir el déficit de cuenta corriente será que el dólar siga aumentando, para hacer más caras las importaciones y los gastos de los argentinos en el exterior.
Hasta el jueves, si bien se atenuó bastante la histeria cambiaria de los días previos, quedó bien claro que la demanda de dólares seguía presente. Por algo el Banco Central decidió el miércoles tomar US$ 2.000 millones del BIS (Banco Internacional de Basilea) para reforzar las reservas, que vienen golpeadas por las ventas de fines de abril.
Fuente: diario Clarín