El vicepresidente de la Cámara de Hoteleros y Gastronómicos de Santa Fe, Joaquín Echagüe, habló en Dame Radio por LT9 sobre el horario ampliado de restricciones y la actividad del fin de semana.

"Creemos que el cambio de horario ayuda porque nos permite estar más tiempo con los locales abiertos, ofrecer mejor servicio y no tener que pelear tanto con los clientes para cerrar a la 1:30, y en vez de eso poder extenderlos hasta las 2:30 los viernes y sábados", sostuvo en diálogo con Adrián Brodsky.

Los nuevos horarios para la circulación en la provincia que rigen para la apertura de bares y restaurantes es de domingos a jueves de 6 a 1:30 y los fines de semana de 6 a 2:30 de la madrugada.

"Hay gente reacia al cierre, sobre todo los más jóvenes, porque al no haber otras actividades reguladas todavía las pocas salidas son a los bares y con estos protocolos. Los fines de semana intentan estirarlo un poco más y después terminan en una plaza fuera de los protocolos. Desde la asociación pensamos que toda actividad que tiene un protocolo que todo lo que esté en la clandestinidad", subrayó el empresario.

Actualmente en la provincia, la capacidad máxima en las mesas de locales gastronómicos es de seis personas. Los porcentajes de ocupación eran del 30 % en el interior y ahora son del 50 %. "Entendemos que de a poco se va a seguir normalizando pero pensemos que son capacidades muy reducidas para lo que son los locales y que al verano le queda un tiempito más pero después la gente va a consumir adentro y se va a necesitar más lugar, porque eso complicaría la facturación", destacó Echagüe.

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