El gobierno de Tierra del Fuego propuso cambiar los nombres a las islas Georgias y Sándwich del Sur. El proyecto fue presentado por el gobernador de Tierra del Fuego Gustavo Melella y el secretario de Malvinas, Antártida, Islas del Atlántico Sur y Asuntos Internacionales, Andrés Dachary.

Para ampliar detalles de esta iniciativa, LT9 dialogó en exclusivo con Andrés Dachary, quien comentó la complejidad en términos históricos de la provincia -Tierra del Fuego-, en suma a todo lo que esté vinculado a la soberanía, esto "exige un conocimiento muy grande" sostuvo.

Por este motivo, explicó que desde del equipo de trabajo se encuentran permanentemente atentos a repasar los procesos históricos "en términos de cómo se construye la postura argentina en función de estos reclamos" y en este sentido, planteó: "La primera incongruencia que siempre surgía, cuando vos tenés una controversia soberana en cualquier parte del mundo, las partes llaman de distintas maneras a los territorios en disputa, porque claramente hay distintos procesos históricos o argumentaciones de un y de otro lado".

Dachary destacó que la iniciativa no parte de un sentimiento nacionalista, sino que el problema de los nombres de las islas es que "no respetan los procesos históricos de sus descubrimientos, se llaman Georgia en honor a Jorge III, del rey inglés, y Sandwich en honor al primer Lorde, el Almirante británico".

Posteriormente realizó un repaso de los procesos de descubrimiento: "Las islas Georgia del sur, fueron descubiertas por navegantes españoles 19 años antes de lo que se quieren atribuir los británicos, fueron nominadas Islas San Pedro y este es el nombre que nosotros estamos proponiendo para que sean así las rebautizadas".

Los pilares de la propuesta "son el derecho internacional y los procesos históricos de los descubrimientos". 

Mientras que, para el caso de las Islas Sandwich del Sur, "lo que estamos proponiendo es que adquieran el nombre de Islas Esquivel, en honor a lo que fue el primer refugio que construyó nuestro país, que es un hito incontrastable en todo lo que tiene que ver soberanía y jurisdicción de la provincia de Tierra del Fuego en estos archipiélagos".

Esta decisión "está basada en ser fieles a la historia y a los procesos históricos, que paradójicamente los nombres que tienen estos archipiélagos no los reflejan" indicó el funcionario. 

En lo que refiere a la posible instancia legislativa del proceso, Dachary explicó que "si esto fuese en cualquier otra provincia del país, los gobiernos provinciales tendrían la capacidad de modificarlo, pero aquellos territorios que tienen sensibilidad estratégica -por llamarlo de alguna manera-, requieren la intervención del Instituto Geográfico Nacional y este a su vez puede coordinar con comisiones que involucren a distintas instituciones, inclusive la Cancillería Nacional y el Ministerio de Defensa".

Por otra parte, Dachary señaló que desde el oficialismo aún no tuvieron respuesta, pero advirtió que el proceso "es una competencia técnica". Además, detalló que si recibieron respuestas de distintos historiadores, juristas, centros de veteranos de guerra de todo el país, diputados y senadores, "todos mostraron su adhesión". 

Finalmente, consultado por la posible materialización de un proyecto de cooperación logística militar entre Estados Unidos y Argentina, el secretario distinguió dos cuestiones, en primer lugar "Jake Sullivan, el subsecretario de Estados Unidos para América Latina, salió a las 24 horas a desmentir esto dijo que ‘no hay un interés de construcción de una base’” y por otro lado, manifestó que la presencia de la general del ejército estadounidense, Laura Richardson, “no implica un cambio en la postura de los Estados Unidos con el conflicto de Malvinas, recordemos que históricamente Estados Unidos se ha declarado neutral en lo que es la controversia soberana ni tampoco un aval hacia lo que tiene que ver con la reclamación soberana de nuestro país en Antártida".

"La peor combinación es tener una base militar conjunta con un tercer país, sea cual fuere. En este sentido no hay absolutamente ningún componente ideológico en el hecho de que sea Estados Unidos" concluyó.

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