Una empresa estadounidense implantará en algunos de sus empleados unos microchips que facilitan tareas como abrir puertas, acceder a ordenadores, hacer fotocopias, compartir información o pagar compras de máquinas expendedoras.
Según publica el sitio The Verge, unos cincuenta trabajadores de Three Square Market, una compañía desarrolladora de software para máquinas expendedoras, se han ofrecido por propia voluntad para participar en la iniciativa.
La empresa, en el estado de Wisconsin, utiliza una tecnología de comunicación inhalámbrica y corto alcance similar a la NFC (Near Field Communication).
De acuerdo con la firma, estos chips incorporan unos sensores que, al ser escaneados, permitirán a los empleados acceder a información en ordenadores u otros dispositivos, así como pagar compras mediante tecnologías de identificación por radiofrecuencia (sin necesidad de usar tarjetas de crédito o teléfonos móviles).
La compañía asegura que no pondrán en riesgo la privacidad de los trabajadores, ya que los datos almacenados en el chip estarán encriptados y no se podrán rastrear por GPS, de modo que su funcionalidad sería parecida a una llave o tarjeta de acceso electrónica.
"Creemos que es una buena forma de avanzar en la innovación de la empresa (...) Los chips no emiten ninguna señal por sí mismos, tienen que ser leídos con cualquier objeto que tenga un lector de proximidad", explicó Westby.
En febrero de este año, una empresa de Bélgica hizo el mismo anuncio y recibió tantas críticas por las implicancias del proyecto que tuvo que salir públicamente a defenderse con las razones de la implementación de una tecnología que, al menos a primera vista y potencialmente, parece demasiado invasiva.
Fuente: La Voz